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sábado, 3 de enero de 2009

La Marcha de San Lorenzo

Me encantó la historia (que desconocía por completo) y se las paso.Me la hizo llegar el Lic. Gustavo O. Delfino
Un poco de historia sobre la Marcha de San Lorenzo. No les vendrá mal.Seguro que no lo sabían... yo tampoco, y me vino muy bien tener esta información.
En cada fiesta patria argentina se escucha, al principio o al final, la Marcha de San Lorenzo. Febo Asoma, ya sus rayos... etc. Ya sea a través de una grabación, entonada por los asistentes o tocada por una banda militar, varias veces por año disfrutamos de la querida Marcha, una tonada de neto corte marcial que nos resulta alegre y pegadiza a la vez que heroica y épica, que logra el difícil objetivo de despertar en los asistentes algunos sentimientos de alicaído patriotismo.
Sin habernos adentrado demasiado en la génesis de la pieza musical, sino tan solo del conocimiento adquirido en la etapa escolar, algo conocemos respecto del tema. Si alguien nos preguntara qué sabemos de la Marcha de San Lorenzo nos vendrían a la mente los siguientes preconceptos:
1. Debe haberla compuesto algún ilustre maestro musical argentino, de estirpe patricia.2. Debe tratarse de un marcha imaginada especialmente en homenaje al General San Martín.3. Desde su creación debe tener esa letra acorde a la gran batalla.4. La habrán creado por encargo del gobierno nacional.5. Con el correr de los años, el autor habrá alcanzado el reconocimiento y distinción acordes a su obra patriótica.6. Se debe utilizar solamente en Argentina y con el fin de ensalzar la gesta Sanmartiniana.Esa breve descripción alcanzaría para sintetizar lo que la mayoría creemos saber y/o imaginamos respecto de la Marcha de San Lorenzo.
Pero estaríamos enormemente equivocados.
LA REALIDAD (o parte de ella):Cayetano Alberto Silva (1868-1920) nació en San Carlos, departamento de Maldonado (Uruguay). Era hijo de Natalia Silva, esclava de la familia que le dio el apellido. Desde niño, reveló una marcada vocación por la música, incorporándose a los 12 años a la Banda Popular de San Carlos, asignándosele el pistón. Integró luego la Banda de Montevideo, recibiendo lecciones de corno y violín de su director Gerardo Grasso. Fue el violín su instrumento preferido. Con el tiempo viajó a Buenos Aires incursionando en el Teatro Colón y asistió a la Escuela de Música dirigida por Pablo Beruti, destacándose ya en la composición. Se trasladó a Rosario donde fur nombrado maestro de Banda del Regimiento 7 de Infantería. Fundó la Banda de San Juan, la de los Regimientos 11, 3, 9, 6 y 15 de Infantería...
Contratado por la Sociedad Italiana de Venado Tuerto (Prov. de Santa Fe) formó y dirigió la Banda de Música local, fundó además un Centro Lírico, enseñó música y creó la "Rondalla" con la que actuó en el Carnaval de 1900. Escribió también la música de las obras para teatro de su compatriota y amigo Florencio Sánchez: "Canillita" y "Cédulas de San Juan". Fue en Venado Tuerto, además, donde, llevado por sus líricos sueños de creador que continuamente acicateaban su prolífica inspiración, comenzó a componer esa música, perfectamente ajustada al género marcial que llevaría por título: "Marcha de San Lorenzo". Había pensado llamarla "San Martín", pero como era conocido del Coronel Ricchieri (ministro de Guerra, en ese entonces) al enviarle la partitura dedicándosela (sin nombre y sin letra), éste le pide que su nombre sea San Lorenzo, en reconocimiento al lugar donde había nacido.
La marcha se interpretó por primera vez en un acto público el 30 de octubre de 1902 en San Lorenzo y en las cercanías del histórico convento de San Carlos, lugar en el que se gestó la batalla entre los Granaderos a Caballo y las tropas españolas. En esa oportunidad el maestro Silvia dirigió la ejecución. Ese mismo día fue designada Marcha Oficial del Ejército Argentino. Dos días después Silva volvió a dirigirla al inaugurarse al Monumento al Gral. San Martín en la ciudad de Santa Fe, con la asistencia del Pte. Julio A. Roca y de Ricchieri.
Cinco años más tarde su vecino y amigo de Venado Tuerto, Javier Benielli le puso la letra alegórica a la victoria de los granaderos. Un poema épico en el que se exalta la figura de San Martín y se rinde homenaje al Sgto. Juan Bautista Cabral, el soldado que dio la vida por su jefe. De allí en más, la marcha recorrió el mundo.
Acosado por la pobreza, el músico vende los derechos de autor a un editor de Buenos Aires, por una ínfima suma.
Al leer sus versos, inconcientemente el recuerdo del ritmo vibrante y marcial de la música nos llevará a entonarlos con gran emoción:
Febo asoma; ya sus rayosiluminan el histórico convento;tras los muros, sordo ruidooír se deja de corceles y de acero;son las huestes que preparaSan Martín para luchar en San Lorenzo;el clarín estridente sonóy a la voz del gran jefea la carga ordenó......Cabral, soldado heroico,cubriéndose de gloria,cual precio a la victoria,su vida rinde, haciéndose inmortal.Y allí, salvo su arrojo,la libertad nacientede medio continente.íHonor, honor al gran Cabral!
A partir de 1997, se adoptó para rendir honores al presidente de nuestra Nación.En los institutos de enseñanza se canta la versión escrita por el músico y pedagogo Clemente B. Creppi. Cayetano Silva escribió además, entre otras, las marchas tituladas: "Río Negro", "22 de julio", "Marcha de San Genaro" (en honor a esa población cercana a Rosario), "Curupayti" (inspirada en la Guerra del Paraguay) y "Tuyuti". Estas dos últimas con letra de Benielli.En sus últimos años se radicó nuevamente en Rosario, dedicándose a la enseñanza de la música.
Creó un conservatorio y desempeñó el cargo de director de la Orquesta de la ciudad.
La marcha (a la que en Europa se considera una de la cinco mejores partituras militares de la historia) se hizo famosa y empezó a girar por el mundo, y estuvo presente en momentos históricos fundamentales:.
Fue ejecutada el 22 de junio de 1911 durante la coronación del rey Jorge V con la autorización previa solicitada a nuestro país por el gobierno inglés.
Lo mismo ocurrió para la coronación de la reina Isabel, actual soberana inglesa.
Se ejecuta habitualmente en los cambios de guardia del palacio de Buckinghan, modalidad que fue suspendida en el tiempo que duró la Guerra de las Malvinas.
Fue incorporada al repertorio de bandas militares de Uruguay, Brasil y Polonia, entre otros.
Fue usada como música incidental en algunas películas (creo que la escuché en Rescatando al Soldado Ryan).-
El Ejercito Argentino, como muestra de amistad (Y previa al nazismo), le regalo la Marcha de San Lorenzo al Ejercito Alemán y a cambio, en camaradería, este nos regalo la Marcha "Viejos Camaradas" o "Alten Kameraden" o "Ich hatte einen guten Kameraden" una hermosa y marcial marcha que por supuesto la hemos escuchado en numerosas ocasiones en nuestras fiestas patrias.
La Marcha de San Lorenzo fue tocada por los alemanes en París cuando durante la Segunda Guerra Mundial entraron triunfantes por el Arco del Triunfo de esa ciudad.
Curiosamente también el general Einsenhower la hizo ejecutar al ingreso triunfal del ejército aliado que liberara a los parisinos, a manera de desagravio.
La muerte lo sorprendió ocupando un modestísimo empleo en la Policía.
Se le negó sepultura en el Panteón Policial por ser de raza negra, por lo que fue sepultado sin nombre. Afortunadamente, el pueblo de Venado Tuerto reparó tal oprobio al trasladar sus restos en 1997 al cementerio municipal de la ciudad a través de gestiones efectuadas por la Asociación Amigos de la Casa Histórica Cayetano Silva. Casa en la que vivió y es hoy sede del Museo Regional y de la Banda Municipal.
"Hemos aprendido a volar como los pájaros y a navegar como peces, pero no hemos aprendido el sencillo arte de vivir como hermanos". (Martín Luther King).

Mono Liso

Mono Liso
El Giocondo que me dicen